Muchas empresas y organizaciones utilizan tableros kanban (también conocidos como sistemas kanban) para visualizar las tareas y gestionar los flujos de trabajo. En un tablero kanban, cada «tarjeta» representa una tarea, que se puede organizar y mover en función de su progreso actual. Las columnas indican las etapas del progreso, como la lluvia de ideas, la producción, las pruebas o la finalización.
Usa una plantilla kanban para:
Un tablero kanban simple y tradicional utiliza tres columnas: «Por hacer», «En curso» y «Listo». Sin embargo, puedes añadir tantas columnas como necesites para representar las etapas de tu proyecto.
Asigne a cada tarjeta kanban un título conciso y descriptivo. Cualquier persona que vea el kanban debería poder entender fácilmente la tarea de un vistazo.
Establezca límites en la cantidad de tareas en cada columna. Los límites evitan la sobrecarga de los flujos de trabajo y alientan a los equipos a priorizar y concentrarse.
Asigne cada tarjeta a uno o más miembros del equipo según sea necesario. No olvides actualizar tu flujo de kanban a medida que se crean o completan nuevas tareas.